1. Reducción del Estrés: Las mascotas, al igual que los humanos, pueden experimentar estrés y ansiedad. Aceites como la lavanda o el manzanilla son conocidos por sus propiedades calmantes y pueden ayudar a crear un entorno más relajante para tu amigo peludo.

2. Alivio de Dolores: Algunos aceites esenciales poseen propiedades antiinflamatorias que pueden ser beneficiosas en casos de dolor muscular o articular. El aceite de eucalipto, por ejemplo, puede ser útil para aliviar molestias.

3. Mejora del Estado de Ánimo: Si tu mascota tiende a estar un poco melancólica o apática, aceites como el de cítricos pueden levantar su ánimo y devolverle la energía.

4. Control de Plagas: Algunos aceites, como el de menta o citronela, actúan como repelentes naturales de insectos, protegiendo a tu mascota de molestos parásitos.